Mina Invierno comunicó que cesó el contrato a 110 trabajadores que se desempeñaban en labores de jefes de departamento, supervisión, operación, mantenimiento y administración.
“Lo que más nos duele, sin duda, es la pérdida de empleos de calidad que ha afectado a personas que formaban parte de la familia Mina Invierno; un 90% de ellas magallánicas. Se trata de hombres y mujeres que, en su mayoría, no tenían experiencia en la industria, que fueron formados como operarios mineros de excelencia y hoy, muchos de ellos, tendrán que abandonar la región en busca de alternativas laborales”, declaró el gerente general de la compañía, Guillermo Hernández, quien lamentó profundamente la situación.
Esta desvinculación se realiza en el marco del proceso de paralización programada, como consecuencia del fallo del Tribunal Ambiental de Valdivia, que revocó la autorización ambiental otorgada por el Servicio de Evaluación Ambiental para utilizar tronaduras como método complementario para la extracción de material estéril.
Hernández hizo ver que la paralización programada de Mina Invierno está teniendo también consecuencias sociales y económicas para los vecinos en Isla Riesco y para más de 200 Pymes regionales.
En el ámbito educativo, Mina Invierno también ha tenido que ir poniendo fin a diversos programas. “Durante 2019 nos hemos visto en la obligación de ir cerrando un exitoso programa de capacitación que abría opciones de prácticas y oportunidades laborales a los alumnos del Instituto Don Bosco, Inacap y Universidad Santo Tomás. Junto con ello, también hemos debido discontinuar programas de educación ambiental y de incentivo al deporte”, enfatizó el ejecutivo.
Desde la minera, se indicó que la paralización de Mina Invierno está lejos de terminar con el uso del carbón en nuestro país. Chile seguirá requiriéndolo como parte de su matriz energética al menos por los próximos 10 años. “Tristemente, el carbón que se utilice vendrá del extranjero, ya que el carbón chileno, el carbón de Magallanes, estaría muy próximo a dejar de producirse, de no ser posible revertir en la Corte Suprema la decisión tomada por el Tribunal Ambiental de Valdivia”, puntualizó Hernández.(LA PRENSA AUSTRAL)